ΛPICVLΛ RΛW HONEY esta fuertemente comprometida con la conservación de los ecosistemas y el bienestar de las más de 1000 especies de abejas que habitan en la Península Ibérica, practicando una apicultura centrada en ellas y no en las exigencias productivas de la apicultura a cualquier coste. Por ende, los requerimientos productivos del mercado pasan a un segundo plano, con el fin de recuperar y fortalecer el sistema inmune de las abejas (Apis Mellifera), y darles la oportunidad de poder desarrollarse según sus ciclos naturales y ancestrales, trayendo como consecuencia una plenitud del ecosistema en el que se hallan.
A diferencia de la apicultura convencional. La apicultura biodinámica expone unas metodologías más profundas y respetuosas con el medio y los elementos que interactúan en él, trayendo consigo una excelente calidad de sus productos.
La apicultura biodinámica o natural es diametralmente opuesta a las prácticas de la apicultura convencional en varios sentidos, en los que destacan los siguientes factores:
1. Cera . Este tipo de apicultura no permite el uso de cera estampada o cera ajena a la explotación, debido a la gran problemática de contaminantes químicos encontrados a lo largo de la cadena de producción de cera estampada (como consumidores os echaríais las manos a la cabeza). Unas pequeñas franjas de cera virgen y 100% orgánica proveniente de los opérculos de nuestras colmenas, sirven de guía en el inicio de construcción de los panales para la cámara de cría.
La medida de la celdilla natural puede variar según el medio al que estén adaptadas, midiendo desde 4,6-5mm las Obreras y 5,8-6,2mm Zanganos . En 1893 en Bélgica, el profesor Baudoux empezó a divulgar que cuanto más grande la celda, mayor cosecha. Y no le faltaba razón en las matemáticas , pero han continuado sin reflexionar otros aspectos muy relevantes, ¿cómo afectara dicho cambio? En 1985 Varroa destructor entra en la Península a través del comercio internacional con China. Esto provoca un crisis apicola mundial ya que entra y ataca con mucha virulencia a nuestra Apis Mellifera, debido a ese aumento de las celdas originado 100 años atrás y otros factores. Se ha descubierto que la Varroa vive en las celdas más grandes de la colmena, la de Zangano … Lo que hace pensar que debemos volver al tamaño original de celda para no abastecer con tanto espacio al ácaro. La sociedad esta acostumbrada a que le den la solución por eso los apicultores empezaron a medicar a las abejas como si de un dolor de cabeza se tratara, en vez observar el comportamiento de dicho ácaro.
Con este método fomentamos la producción y construcción natural de panales estimulando el sistema inmunológico y sanitario de las Apis Mellifera, a la vez que reducimos el espacio potencialmente habitable para Varroa destructor, que se encarga de menguar la población de abejas junto a muchos otros factores. Respetando su naturaleza nos beneficiamos de unos productos con ZERO residuos.
Fuente: XX Jubilee Apimondia Congress – August, 1965
2. Reproducción de colonias. En apicultura biodinámica las colonias pueden reproducirse sólo por el instinto ancestral de enjambrazón, a diferencia de la apicultura convencional en la que este impulso es reprimido, ya que esta época coincide con las primeras floraciones.
Bajo nuestra filosofía, el instinto de enjambrazón contribuye a prevenir hongos y enfermedades bacterianas de las colonias como la Loque europea o Nosema ceranae y disminuir la presión del ácaro varroa. Debido a que esa migración de la colmena al punto deseado el vuelo
En promedio, en un apiario manejado bajo los principios biodinámicos, el 30% de las colonias enjambran cada año, lo que permite la regeneración natural. Este instinto permite la ampliación del número de colmenas en igual porcentaje de manera anual, suponiendo que todos los enjambres son atrapados y colocados en nuevas colmenas.
3. Revisiones. Las revisiones se hacen en base al calendario biodinámico de María Thun, para favorecer el desarrollo de las colmenas.
4. Cría de reinas. Renunciamos por completo a la cría artificial de las reinas, y fomentamos la puesta de reinas de manera natural, respetando el instinto de enjambrazón. Esto responde a la necesidad de fortalecer la diversidad genética, la cual se ha ido perdiendo de manera alarmante por medio de los métodos convencionales. Conservar la diversidad genética, y por tanto un máximo de facultades, significa multiplicar las colonias por el instinto de enjambrazón y por el acoplamiento in situ.